jueves, 9 de septiembre de 2010
miércoles, 10 de febrero de 2010
Recapitulación
Ya pasa de lejos el año cumplido, un año lleno de vivencias por mi parte, y seguro que por la de todos. Un año, y un poquito más, en el que han sucedido treinta y cuatro entradas variadas, diferentes, extrañas y queridas. Pero siempre con objetivos comunes: analizar las cosas, darles sentido, cargarlas de emoción y arte, y sobre todo hacer pensar.
Para mí ha sido una experiencia fantástica (lo digo como si fuera a acabar, pero ni mucho menos), y doy las gracias a la gente que ha leido, ha comentado y me ha dado su opinión. (Aunque ahora mismo, por lo que sé, sea una persona, tal vez 2 xD)
Pero el ritmo ya había cambiado hace unos meses, ya lo saben, y pese a intentar volver a abordarlo, no lo consigo del todo. Por eso mismo, quiero simplemente decir que el blog ha estado descuidado, y, por desgracia, es probable que lo siga estando. Al menos de la forma en que lo estaba dando a entender de aquí hacia atrás.
No es fácil hacer cosas que, dentro de lo que cabe y tal como me parecen, tengan calidad. Tal vez no es la etapa más fácil que paso. Tal vez no hubiera podido hacer más con la poca difusión, y poca retroalimentación, que tiene esto (apenas unos links en varios perfiles personales en internet).
En fin, el caso es que esto cambia, aún no sé muy bien cómo. Dejemos ver que pasa, y por donde me lleva el espíritu.
Para mí ha sido una experiencia fantástica (lo digo como si fuera a acabar, pero ni mucho menos), y doy las gracias a la gente que ha leido, ha comentado y me ha dado su opinión. (Aunque ahora mismo, por lo que sé, sea una persona, tal vez 2 xD)
Pero el ritmo ya había cambiado hace unos meses, ya lo saben, y pese a intentar volver a abordarlo, no lo consigo del todo. Por eso mismo, quiero simplemente decir que el blog ha estado descuidado, y, por desgracia, es probable que lo siga estando. Al menos de la forma en que lo estaba dando a entender de aquí hacia atrás.
No es fácil hacer cosas que, dentro de lo que cabe y tal como me parecen, tengan calidad. Tal vez no es la etapa más fácil que paso. Tal vez no hubiera podido hacer más con la poca difusión, y poca retroalimentación, que tiene esto (apenas unos links en varios perfiles personales en internet).
En fin, el caso es que esto cambia, aún no sé muy bien cómo. Dejemos ver que pasa, y por donde me lleva el espíritu.
jueves, 14 de enero de 2010
Espiral
Cuando lo leía no lo acababa de creer, pero parece que esto es así. Todo blog sube y baja. Todo autor se motiva, o se desmotiva a crear. Y a mi me ha pasado.
Hace ya dos meses, casi, que no paso por aquí. Es hasta irónico que la última entrada que se publicara fuera un día antes de la fecha de cumpleaños de la página, que tenía por lo menos pensado anunciar.
En fin, las navidades han transcurrido. Se han ido, como se van siempre. Y aunque este año no hay reflexión gatuna, que a todas luces iba a ser parecida a la pasada, volvemos por aquí con más delirios. No se si aún hay gente que seguía visitando el blog, pero si es así, muchas gracias a todos, y por otro lado, les pido disculpas por descuidarlo de esta forma.
Hace ya dos meses, casi, que no paso por aquí. Es hasta irónico que la última entrada que se publicara fuera un día antes de la fecha de cumpleaños de la página, que tenía por lo menos pensado anunciar.
En fin, las navidades han transcurrido. Se han ido, como se van siempre. Y aunque este año no hay reflexión gatuna, que a todas luces iba a ser parecida a la pasada, volvemos por aquí con más delirios. No se si aún hay gente que seguía visitando el blog, pero si es así, muchas gracias a todos, y por otro lado, les pido disculpas por descuidarlo de esta forma.
Hoy vuelas entre sólidas nubes. El viento, antes suave y delicado, te azota la cara, y el sol, inconscientemente, no te trata con cuidado. Te quema, y apenas puedes abrir los ojos.
Hoy eres como el rey carmesí. No sabrás si sonríes o entristeces. Crees mandar sobre un reino que no conoces, y del que te consideras monarca.
Hoy vives, o no vives. Te preguntas si surcar el cielo sin rumbo es volar. Añoras ver tierra de nuevo, añoras caminar.
Hoy cambias tu piel, hinchas tu pecho. Temes decaer, y aún más, que los demás se den cuenta.
Pero hoy también danzas, bailas y saltas. Y, como pulsos, cada vez que tu cuerpo encanta al cielo con un movimiento, irradias luz, para luego, de un disparo, recogerla hermosamente.
Hoy también sonríes. Y me conduces por el oscuro camino que ansío recorrer, por el que vivo.
Hoy es ciclo. Hoy es luz. Hoy es yo.
Hoy, por encima de todo... Eres tú.
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